COMPRESORES Y SINTETIZADORES DE VOZ: EL "VOCODER" Y EL "VODER"

 

 

Esta parte de la historia empieza a mediados de la década de 1920. En la costa del Atlántico mirando por encima de las olas hacia la lejana Europa. 

Nada tiene que ver, originalmente, con la criptografía; sino con el despliegue de líneas telefónica transatlánticas, entre Estados Unidos y Europa.

La American Telephone and Telegraph, AT&T, pretende conseguir que la inversión sea rentable compitiendo con el telégrafo, que lleva unas décadas funcionando. Las instalaciones de este último son más sencillas de mantener que las telefónicas. El reto es conseguir un servicio competitivo. El precio de las llamadas transatlánticas no puede ser excesivo y se podría reducir si aumentase el número de conversaciones que se transmitiesen a la vez. Esto se consigue añadiendo más cables que crucen el océano o “introduciendo” más conversaciones en cada cable.

Investigar la segunda opción se convertiría en un proyecto interesante. El objetivo sería comprimir el ancho de banda vocal de los interlocutores. El esquema básico sería el siguiente. A la central de una orilla llegarían las comunicaciones telefónicas desde el interior de un país. Un equipo especial comprimiría las señales antes de entregarlas a los cables submarinos. En la orilla opuesta, los cables estarían conectados a un descompresor capaz de reconstruir las señales originales y continuarlas por la red telefónica de otro país.

Los Laboratorios Bell, H. Dudley, se enfrentó al diseño de un compresor de voz, que llamó VOCODER. Este aparato primigenio, nada tiene que ver con los VOCODER actuales. Como veremos, es un dispositivo analógico, construido con filtros, osciladores y moduladores. Conoceremos los razonamientos de H. Dudley que llevaron a su construcción.

El VOCODER no consiguió su objetivo, comprimir las conversaciones telefónicas para sus transmisión transoceánica. Resultaba complejo y caro; además de encotrar otros problemas. En cambio, su concepto original permitió diseñar nuevos aparatos como el sintetizador de voz VODER, espectrógrafos, instrumentos musicales, ayuda para los estudios médicos, etc. Finalmente, también se aprovechó para ingeniar sistemas de encriptación telefónica que terminaron siendo utilizados en SIGSALY.

L. F. Real

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